jueves, abril 22, 2010

Más detalles de la vida de Mauricio

Lo publica La Voz y es un exponente de que  hay alternativas en la adopción y amplío  entrada del día 20 el joven confirmó que no tiene más hermanos

Han pasado sólo 48 horas desde que se reencontró con su madre y acumula más vivencias que en sus 23 años de vida. O visto de otra manera: tuvo que esperar todo este tiempo para empezar a conocer quién es, cómo nació, cómo fueron sus primeros días y quiénes son "los suyos".

Este es el cuento del cordobés que a través de Facebook consiguió encontrar a su madre biológica gracias a la inercia que generaron las 25 mil adhesiones al correo electrónico buscomimama@hotmail.com.

Tan sencilla idea generó una vertiginosa seguidilla de jornadas que comenzaron hace sólo 10 días. Al final, el encuentro con su madre fue el domingo pasado en una plaza de Córdoba.

Ahora, puede decirse que recuperó la memoria, o que está reescribiendo su historia. Todavía está trazada con demasiados grises, al punto que aún no tiene bien claro cuál es su nombre. Mide 1,69 y todos sus amigos (más altos) le dicen "Nano" o "Enano". Su mamá biológica "lo bautizó" como Mauricio Barrios cuando lo tuvo en una casa del centro de Córdoba, el 11 de enero de 1987. Y sus padres del corazón lo inscribieron en el DNI como David Romero Bordón.

En los últimos 10 días, comenzó a reconstruir esa historia y a emocionarse, en cámara lenta, hasta llegar a su mamá. Empezó con amigos y tíos, luego con sus abuelos y, finalmente, con su madre.

Ayer, Mauricio (o David) aceptó hablar con este medio desde la Capital Federal. Así, contó que ahora se está enterando de que su mamá no pudo tenerlo por diversos problemas pero que, con gran responsabilidad, decidió darle un destino seguro.

Nació sietemesino y con muchas posibilidades de tener discapacidades visuales o auditivas. Por eso, lo tuvieron internado un mes en el Hospital Misericordia.

Así, ahora se enteró que una mujer muy allegada lo cuidaba todos los días y que su mamá (cuyo nombre no trasciende todavía) iba todas las tardes a amamantarlo. Iris, una amiga de su madre, se encargó de dárselo a los que hoy son sus "viejos" o los "papás del corazón", Chiche Romero y Sarita Bordón.

Hablar con David o Mauricio es reconocer a una persona de energía única, capaz de sostener una búsqueda que comenzó a los 5 años, cuando sus "viejos" decidieron contarle toda la verdad. "Querían que, cuando yo lo decidiera, empezara la búsqueda, especialmente para saber si tenía hermanos", dijo emocionado.

Los 10 días previos al encuentro con su madre fue como seguir una pista, un rastro por los lugares por donde ella transitó. Cuando lo tuvo, la mamá trabajaba en un quiosco de calle 9 de Julio. Fue necesario que Mauricio viajara a Villa del Totoral, San Pedro Norte y otras poblaciones para encontrar las raíces de su madre.

El domingo recibió una comunicación de su tía, que le anticipaba el llamado de su madre. Esa espera se hizo eterna. Con sus viejos se tomaron de las manos y rezaron un "Padre nuestro" y un "Dios te salve". El celular comenzó a latir y al atender, escuchó a su mamá.

"Me estoy mirando en tus ojos, me miro al espejo", le dijo a su mamá cuando pudo estrecharla en un abrazo.

"Es una historia cerrada, pero con final abierto" reconoce Mauri. "Ella tiene hecha su vida y necesita blanquear su situación", explica.

Si la historia todavía no está escrita con trazo firme, hay cosas que el protagonista tiene en claro: el amor de "sus viejos del corazón", igual que el de su mamá biológica, y que ahora tiene todo por delante para empezar a recuperar el tiempo perdido.

Una organización

Mauricio dice que ahora se va a dedicar a crear en Córdoba una entidad para que los hijos adoptivos encuentren a sus padres biológicos. "Que los padres adoptivos no sean egoístas con sus hijos, que les cuenten la verdad. Es preferible llorar con la verdad que sufrir con la mentira", sintetizó.





1 comentario:

Leona catalana dijo...

No creo que haya que preocuparse por el final, no es un niño. Su lugar está obviamente al lado de Chiche y Sarita cómo hasta ahora, pero con relación familiar con la madre reencontrada y sus hermanos si los tuviere.

Supongo que con la frase de que su madre ha de "blanquear su situación" se refiere a que la familia no sabe nada de Mauricio. Bueno, lo saben los tíos y los abuelos, conque no creo que haya problema.

Los "papás del corazón" han demostrado mucha humanidad y amor, no sólo por haberse ocupado de él y querido tanto, sino por no haberle ocultado nada y ayudado.

Un abrazo y gracias por seguir los acontecimientos.