miércoles, diciembre 22, 2021

Suicidio y Esperanza

Suicidio y Esperanza



 Últimamente arden las redes sociales con el tema del suicidio, y como siempre en esta cultura de la muerte en que estamos sumergidos completamente, en términos absolutamente hipócritas, contradictorios y demenciales.

Mientras que las autoridades dicen preocuparse por la salud mental y el suicidio, aprueban leyes para suicidarse de forma asistida. O sea que lo malo no debe de ser matarse sino si está autorizado por las autoridades o no, si has pedido permiso para matarte o no, porque en la ley de la eutanasia está previsto que la causa puede ser el sufrimiento no solo físico sino psicológico. La causa de sufrimiento psicológico será sin duda como el supuesto de daño psicológico para la madre, el coladero de que pueda pedir suicidio asistido el que quiera y supongo que, como se hacía en los abortorios el formulario de riesgo psicológico para la madre, ya venía rellenado y solamente había que firmarlo como un trámite cada vez más rutinario.

Lo cierto es que el numero de suicidios está multiplicándose y se ha convertido en la primera causa de muerte por causa externa, obviamente sin considerar el aborto, que es la primera causa de muerte en España. Los suicidios han crecido exponencialmente en todas las franjas de edad, pero sobre todo en los niños y en los ancianos. Sospecho que la terrorífica vida que les estamos obligando a vivir supuestamente por su bien (obsérvese que la cultura de la muerte siempre, siempre lo hace todo por nuestro bien), aislados de sus seres queridos, evitando contactos sociales, dificultando su respiración y su vida normal y aterrorizándoles constantemente, ha tenido mucho que ver, sin embargo no es la única causa.

Sin ánimo de profundizar en tal delicadísimo tema solo deseo apuntar dos aspectos a considerar.

Según Victor Frankl, que analizó el comportamiento humano en un campo de concentración, en su libro «El hombre en busca de sentido», sobrevivían aquellos que tenían un motivo por el que vivir, y cuando la esperanza se había perdido, se dejaban morir. El que tiene un porqué vivir siempre encuentra el cómo. Y creo que la epidemia de suicidios tiene mucho que ver con la falta de sentido para la vida. La falta de respuesta a las preguntas fundamentales del ser humano nos conviertes en seres vacíos, desesperanzados, sin rumbo.

Pienso en los jóvenes que se enfrentan a la vida sin Dios, sin la esperanza de tener una familia para siempre como ansía nuestro corazón y sin la esperanza ni siquiera de tener un trabajo decente y motivador con el que poder mantenerse. Entonces ¿qué les queda?

Pienso en los ancianos que se encaran la última etapa de su vida en soledad, que ya han cumplido sus objetivos vitales y cuyo consuelo es la vida eterna y el cariño de sus familias, especialmente de los niños. Si les quitamos eso ¿qué les queda?

Otro motivo que pienso nos afecta a todos es la vida tan compleja y apartada de nuestra naturaleza que llevamos y que nos destroza.

Recuerdo una canción llamada «Degeneration» en la cual va detallando como la vida ha ido degenerando y se aleja mucho de los deseos de nuestro corazón. Dejo el vinculo a la letra que, a mi parecer, merece la pena leer.

El día 18 es la fiesta de la Virgen de la Esperanza, que además es la patrona de , de SpeiMater,  Madre de la Esperanza, y si algo necesita con desesperación (nunca mejor dicho) nuestra sociedad y nuestro corazón en este momento es Esperanza.

La esperanza cristiana no es optimismo, no son frases de autoayuda «todo va a ir bien» «salimos más fuertes». Nos dice el Papa Francisco que la virtud de la esperanza nunca debe confundirse con el optimismo humano, que es una actitud más relacionada con el estado de ánimo. Para un cristiano, la esperanza es Jesús en persona, es su fuerza de liberar y volver a hacer nueva cada vida. 

El Papa Benedicto tiene una encíclica entera dedicada a la esperanza «Spe Salvi» de obligada lectura en las circunstancias actuales. «A lo largo de su existencia, el hombre tiene muchas esperanzas, más grandes o más pequeñas, diferentes según los períodos de su vida. A veces puede parecer que una de estas esperanzas lo llena totalmente y que no necesita de ninguna otra. Puede ser la esperanza del amor a una persona; la esperanza de cierta posición en la profesión, de uno u otro éxito determinante para el resto de su vida. Sin embargo, cuando estas esperanzas se cumplen, se ve claramente que esto, aunque sea bueno, en realidad, no lo era todo. Está claro que el hombre necesita una esperanza que vaya más allá. Es evidente que solo puede contentarse con algo infinito, algo que será siempre más de lo que nunca podrá alcanzar».

Únicamente Dios es nuestra Esperanza, una esperanza firme porque Dios cumple sus promesas y en Dios podemos confiarnos. A veces sentimos turbación y desesperanza, parece que el mal no tiene límite, pero sí lo tiene. Madre de la Esperanza, intercede por nosotros.




martes, noviembre 09, 2021

Psicosis social y colectiva y salvación de Cristo II

 


Como adelanté la semana pasada voy a seguir con el análisis del vídeo sobre la psicosis colectiva e individual en esta segunda parte del artículo, en la que aún no voy a entrar en la solución, que como ya apunte en el anterior artículo la del vídeo se me queda muy corta. Se queda corta porque el hombre no se puede salvar a sí mismo, necesita redención y el único redentor es Cristo, fuera de eso puede haber ideas más o menos acertadas, pero no dan una respuesta integral al sentido de la existencia humana ni son capaces de salvarlo.

Primer punto importante: la perversidad de las ideologías

“La ideología es la que le da al mal su justificación y al que perpetra el mal la determinación necesaria para actuar. La ideología es el marco teórico que hace que sus actos parezcan buenos en lugar de malos tanto a sus propios ojos como a los ojos de los demás y de forma que en lugar de recibir reproches o insultos reciba alabanzas y honores.” Aleksandr Solzhenitsyn

La ideología es la clave que justifica los actos más malvados. La ideología sustituye a la realidad, dejamos de vivir en la realidad, es decir, en la verdad y pasamos a vivir en la mentira.

En la definición de Aleksandr hay algo que me recuerda mucho, muchísimo al Génesis: “hacer que los actos parezcan buenos en lugar de malos”. Este es el pecado original de nuestros padres, que el hombre decida al margen de Dios lo que está bien o mal, que no es otra cosa que el relativismo moral imperante y que tan a menudo se nos cuela sin darnos cuenta.

Decía Joan Manuel Serrat en una canción “Dios echó al hombre del Edén por confundir lo que está bien con lo que le conviene” No está mal, aunque más acertado sería decir “lo que cree que le conviene, pero le destruye”.

La ideología es muy poderosa y puede hacer que pensemos lo contrario a lo que nos dice toda evidencia, toda racionalidad y todo aquello que nuestra propia naturaleza nos dice. Cuando una mujer se queda embarazada la evidencia, la razón y la naturaleza le dicen que esta embarazada de un hijo, pero la ideología inoculada la hace convencerse de que es su derecho ( ). Una ideología puede convencerme de que un hombre puede ser mujer, o una mujer, hombre o que determinado tipo de personas, como los no nacidos, no son humanos, de que para salvar el planeta hay que aniquilar a la mitad de la población o de cualquier otra cosa por absurda y aterradora que nos pueda parecer a priori.

Cuando estamos esclavizados por una ideología es muy difícil sacarnos de ella, puesto que en cuanto llega una información que no encaja en la narrativa oficial inmediatamente es desechada y la persona que la afirma vilipendiada y perseguida. La Verdad llega y nosotros la rechazamos, el Redentor llega y nosotros le crucificamos.

Segunda cuestión importante: lucha opresores-oprimidos

Desde siempre nos ha gustado echar la culpa de todos nuestros males a otro, es más fácil, nos sentimos mejor, y podemos elegir una cabeza de turco que cortar y tema solucionado o, por lo menos, eso nos parece.

Así pues, el poder nos divide en opresores y oprimidos, y nos propone como respuesta única la hostilidad, la venganza contra el grupo enemigo es un acto ejemplar. Humillar, perseguir e incluso asesinar al supuesto opresor no solo no es malo, sino que es motivo de orgullo. Supongo que les sonara familiar, y que ustedes sin arte ni parte sean parte de esos opresores, porque son varones, de raza blanca, católicos, españoles…. Sí, sí, son todos ustedes unos opresores natos, y yo también, aunque no se sea varón.

Jesucristo es Camino, Verdad y Vida. Las ideologías pasan, las personas mueren, pero Él es el mismo ahora y siempre. Por atribulados que estemos ahora mismo en la Iglesia, y vaya sí lo estamos, puesto que nos hemos adherido a la ideología dominante dejando al Evangelio, Él nos prometió que el poder de la tiniebla no prevalecería, y yo la verdad, le creo.




jueves, noviembre 04, 2021

El buenismo, nuestra perdición

El otro día estuve oyendo a unos jóvenes hablar. Jóvenes buenos y cristianos. Nada que objetar, pero se me ocurrieron varias reflexiones sobre la fe que les hemos transmitido los que peinamos canas, o nos las teñimos para estar más guapos, y me hizo recordar también las cosas que me dijeron en el colegio sobre la fe y como lo vivo ahora desde mi experiencia muchos años después.

Pongo por delante que agradezco mucho a todos los que me transmitieron la fe, y que en estos errores me incluyo a mí misma como persona no tan joven y por lo tanto transmisora de la fe. Que no se me ofendan con lo de que los juzgo, no los juzgo, ni a ellos ni a los jóvenes, simplemente comparo, saco conclusiones… en definitiva pienso, porque como dijo Chesterton «en la iglesia se nos pide que nos quitemos el sombrero y no la cabeza» y parece que en esta época de corrección política toda reflexión es juzgar y cualquier pensamiento crítico debe ser erradicado.

  • Mucho darse a los demás, pero poca mística: los tres primeros mandamientos de la ley de Dios, que, además no son los primeros por casualidad, sino por su importancia, son mandamientos que se refieren a Dios, no al prójimo, porque si yo no amo a Dios no puedo amar al prójimo. Entendamos pues lo que es el Amor que da la vida: puedo sentir compasión, puedo sentir afecto, puedo sentir atracción, puedo querer, pero no el amor cristiano porque este viene de Dios y Dios nos pide amarnos como Él nos ha amado, no de otra manera. Puedo ser «solidario» pero cuando las cosas vienen mal la solidaridad se me acaba. «Aunque yo hablara las lenguas de los ángeles… si no tengo amor, nada dice San Pablo. Este es el amor al que me refiero y ese sin vida espiritual no es posible.

Mucho darse a los demás, pero poca ascética. Si yo soy un pecador empedernido no puedo darme a los demás, es una falacia. Si yo soy lujurioso utilizaré al otro como un objeto para satisfacer mi deseo, si yo soy un codicioso pasaré por encima de quien sea necesario para satisfacer mi ansia de riqueza, si yo soy un soberbio humillaré a los demás para seguir alimentando mi ego… y así con todos los pecados capitales. Si yo no lucho contra MI pecado, mi supuesta entrega a los demás es una farsa.

  • Mucha opinión y poco conocimiento y formación. Somos hijos de nuestro tiempo y por lo tanto hijos del relativismo moral sin darnos cuenta. Yo recuerdo mis clases de religión, sentada en el pupitre opinando sobre esto y aquello y sin tener ni idea ni de esto ni de aquello. Parece que no existe la verdad, que no existe en bien y digo más que no existe la realidad, porque todo es según el cristal con que lo mire. Puesto esto se fomenta, opinar de lo humano y lo divino desde una ignorancia clamorosa.

Mucha emotividad y poca profundidad. Recuerdo una canción que cantábamos de niñas con los ojos en blanco «yo siento Jesús que tú amas, yo siento Jesús que te puedo amar...» y la emotividad no es mala, pero es una capa muy superficial de la persona, acabado el sentimiento se acaba todo, y los sentimientos son muy, pero que muy, volubles y muy, pero que muy, manipulables.

Mucha psicología (o pseudopsicología) y poca teología. Recuerdo un retiro al que acompañé a alumnos de 2º de bachillerato. Empezaba a las 9 y terminaba a la 1 del mediodía. A los 12 de la mañana la palabra Dios no había sido pronunciada. Todo era yo me conozco tú te conoces, pero de Dios ni pío. Y así estamos, no conocemos nada de Dios, ni afectivamente ni efectivamente ni intelectualmente. Durante la charla de los jóvenes se dijeron varias herejías, pero no de matiz de doctorado en teología, de primero de catecismo.

Mucho buenísimo y poca realidad: Como no nos conocemos a nosotros mismos porque solo se conoce uno en la mística y en la ascesis, en la lucha contra nuestros «demonios» que decían los padres del desierto, no somos conscientes de que la naturaleza humana es una naturaleza caída, herida por el pecado original, y nos creemos que “tor el mundo er güeno” como decía la película. Pues no, todo el mundo no es bueno, y lo sé porque yo tampoco lo soy. El pecado se redimió con la muerte en la cruz, no con flores, sonrisas y buen rollito.

Como siempre no quiero despedirme sin esperanza. Hay jóvenes cristianos, hay jóvenes dispuestos a dar testimonio de Cristo, hay futuro en la Iglesia, pero ayudémosles a profundizar en su fe para que el demonio no robe esta semilla.




martes, noviembre 02, 2021

Psicosis colectiva e individual y la salvación de Cristo (I)

 

Psicosis colectiva e individual y la salvación de Cristo (I)



De los tropecietentosmil vídeos que recibimos cada día todos por WhatsApp me he fijado en uno en concreto que me ha parecido puede dar lugar a muchas reflexiones «Psicosis colectiva: cómo nuestra sociedad cayó mentalmente enferma (y cómo escapar de este delirio)» de Jorge Benito https://www.youtube.com/watch?v=8Ccpobip-Fs

Por una parte, su análisis de la manipulación de las masas me parece excelente. Después da soluciones para salir de ese esclavitud de la manipulación y del reino del fanatismo ideológico. Aquí su respuesta a mi entender deja mucho que desear frente al análisis anterior, no importa: es que sin Cristo nada tiene sentido y en Él la encontraremos.

Explica primeramente el objetivo: creación de un sistema de tiranía global donde el poder lo abarque todo. No hay policía para vigilar a 6000 millones de personas luego para lograr una tiranía global la batalla esta en el individuo particular, que los individuos pierdan su individualidad y se adhieran a una mentalidad de grupo. Ahí está el quid de la cuestión y la repuesta, la batalla siempre ha estado en el corazón del hombre.

Tres disparadores que el poder usa para manipular al individuo o convertirlo en masa aborregada:

  • Miedo

  • Confusión

  • Deseo de seguridad

El origen es un grave problema que amenaza a la sociedad, ese problema es obviamente fabricado, para inducir el temor a un peligro inminente.

Después se usa la propaganda para confundir al individuo lo cual aumenta el miedo, noticias constantes y contradictorias entre si. Esto se hace a través de «olas de terror», etapas donde la tensión aumenta exponencialmente seguidas de pequeños momentos de relajación seguidos nuevamente de mayor tensión.

Después el poder presenta una única solución al problema y el pueblo le suplica que la aplique. Por supuesto que para implementar esta solución necesita de medidas excepcionalísimas que destruyen la libertad del individuo, pero no importa, porque ya cuenta con el beneplácito de las masas que le suplican que le arrebate sus derechos para acabar con la amenaza inminente.

Hay un elemento más que utiliza: aislar al individuo y restringir sus relaciones sociales, lo cual le hace más susceptible a ser manipulado. Le lleva a un estado de infantilización que le hace ceder el control de su vida y sus decisiones a otros.

Bien, no creo que tenga yo que decir lo evidente de como describe a la perfección la situación actual, pero si apuntar que esto que sucede a nivel colectivo sucede también a nivel individual, que es como he dicho donde la batalla principal tiene lugar.

Me recuerda mucho al proceso de victimización de una víctima de maltrato o de abuso sexual: el arma del miedo, el alternar periodos de violencia y tensión con periodos de paz y hasta de luna de miel, la técnica del aislamiento para someter a la víctima…

Pero me falta una que el autor de no menciona, pero que me parece una de las más importantes si no la más, la inversión de la culpa. El abusador convence a la víctima de que es culpable, es culpable de sus abusos, es culpable de que la tenga que pegar porque su mal comportamiento o es culpable de matar a su abuelo o de la nueva ola.

Sigue comentando que el individuo enajenado no solo no sabe que lo está, que solo sigue los mandatos prefabricados de su colectivo, sino que se siente superior, siente una superioridad moral a los miembros del grupo opuesto, los que están fuera son enemigos que amenazan con destruirlo todo y eso le autoriza a cometer toda seria de atrocidades justificadas por el bien común.

Esta ceguera merece también meditación. Nos preguntamos como una persona puede apoyar el aborto incluso hasta el noveno mes y no solo eso, sino que acusa a los provida de estar en contra de los derechos de la mujer. Esto es la «ceguera de la razón» o, más bien, la ceguera que produce el pecado, es como estar en una secta que te impide ver la realidad. Solo la luz de Cristo nos devuelve la visión, empezando por hacernos ver que estamos ciegos.

Merece la pena también comentar el bien común y los sacrificios por el bien común. El bien común no existe independientemente del bien de todos y cada uno de los individuos. El bien no se contradice, no puede ser bien para uno y mal para otro. El concepto de bien común no es un concepto cristiano y puede justificar cualquier cosa. Las civilizaciones antiguas sacrificaban niños por el bien común. Aunque las modernas también lo hacemos ¿verdad?

Es importante comprender lo que está pasando en nuestro corazón y lo que está sucediendo en la sociedad, pero esto solo es posible desde la luz de Cristo y solo encontraremos una respuesta desde Él. En el próximo articulo seguiré con este tema.


martes, octubre 12, 2021

Yo también he visto «El juego del calamar»

Yo también he visto «El juego del calamar»

Pues me visto toda la serie y además me la he visto en menos de una semana porque engancha, por lo menos, a mí me engancho y eso que yo me duermo en el 80% de películas y series por más que intenten seguirlas.

Voy a intentar comentar algunas cosas sin destriparla mucho, pero la voy a destripar un poco que se decía en mi época o hacer «spoiler» que se dice ahora.

En primer lugar, no parece una serie satánica en absoluto, como he leído en algunos comentarios, tan mal me parece ver al demonio en todos sitios como no verlo en ninguno y estas dos cosas son grandes tentaciones de la Iglesia a día de hoy, desde la absoluta negación del infierno y de la sobrenaturalidad a la obsesión por pensar que absolutamente todo viene del maligno.

Cada uno puede ver cosas distintas en esta serie, a mí me llamaron la atención algunas de ellas que bien describen nuestra cada vez más enferma y decadente sociedad:

  • Si hay algo que está caracterizado este siglo XXI y por supuesto el XX es el absoluto pérdida de la dignidad y del valor de la vida humana. No solo la vida del otro no tiene valor ninguno, sino que ni siquiera se respetan a sí mismos ni su cuerpo ni su dignidad, todo es negocio, todo puede comprarse y venderse. ¿Cómo valorar la vida de las personas en una sociedad que promueve el aborto y la eutanasia? ¿Como valorar la dignidad de las personas en la sociedad del porno y la promiscuidad?

  • Técnicas de manipulación de las personas. Todo está pesado y medido para que las personas hagan lo que se supone deben de hacer, incluso matarse entre ellos con una técnicas a veces tan simples como dar de comer de menos. Nada nuevo bajo el sol.

  • Todo es voluntario. Y faltaría añadir que todo es por su bien. ¿O no? Las personas manipuladas y chantajeadas tienen el espejismo de que son libres y lo hacen voluntariamente. En realidad, son doblemente esclavizadas, en primer lugar han sido esclavizadas por su pecado, en este caso la avaricia y la ludopatía, y en esta esclavitud de los vicios y las adicciones emprenden una huida hacia delante que lejos de liberarlos los esclaviza aún más y los destruye. Y todo es voluntario por supuesto, no sé a qué me recordará lo de voluntario, pero obligatorio…

  • Los débiles son sacrificados. La aparente solidaridad con los más débiles: mujeres y ancianos desaparece cuando la vida está en juego, volvemos a la selva, la ley del más fuerte

  • Cada uno toma decisiones sin saber las consecuencias que tendrán en el juego. Esas decisiones tienen un claro componente ético, mantienen el libre albedrío, aun en situación de «esclavitud» siguen manteniendo la libertad de optar por el bien o por el mal, eso es algo sagrado que Dios nos ha dado y que nadie nos puede arrebatar. Afortunadamente en la serie las decisiones morales son premiadas a la larga y las inmorales castigadas, aunque en medio perezcan muchos inocentes.

Cosas que he echado en falta:

  • ¿Dónde está Dios? En la serie se hace una mínima referencia a la oración, más como forma supersticiosa de pedir ayuda y tranquilizarse que la creencia en un Dios vivo, real y personal que transforma la existencia. Cabe decir que a pesar de ser Corea, esa referencia a Dios es al Dios cristiano. Una sociedad sin Dios es una sociedad sin humanidad. Dios o nada que decía el Cardenal Sarah.

  • ¿Dónde está la familia? Sin duda se hace una mención al amor paterno filial, aunque con la figura del padre permanentemente ausente. No existe amor ni complementariedad hombre-mujer y el sexo es solo un desahogo sin la menor relación con el amor.

Que terroríficas y deshumanizantes son las sociedades distópicas hacia donde nos están dirigiendo, donde Dios no está presente, donde las personas son esclavas y el otro no es mi prójimo sino mi enemigo, mi rival, o una fuente de contagio, donde no hay más valor que la propia supervivencia a cualquier precio, donde la carencia de familia y de contacto social nos convierte en marionetas tristes y solitarias.

Pero siempre tendremos el libre albedrío, la elección entre el bien y el mal. Y siempre tendremos a Dios, aunque intenten arrebatarnos lo sagrado de la vida social, aunque intenten incluso cortarnos el acceso a los sacramentos Dios es Dios y siempre hay en nuestra alma un lugar sagrado donde nadie puede entrar más que Dios y ahí siempre nos espera. En el centro de nuestro castillo interior mora su Soberana Majestad ¡El vendrá y nos salvará! Bendita crisis la que lleva a la conversión.


María José Mansilla 

Presidenta de Speimater 

martes, octubre 05, 2021

Mujer ¡empodérate!

Mujer ¡empodérate!

Lleva un par de días comentándose en las redes sociales un cartel que dice «Mujer empodérate, mata a tu hijo». Algunos creen que es falso y otros que verdadero porque es una verdad tan descarnada que hace daño a los ojos, pero vamos, que se corresponde plenamente a la realidad; se le vende a la mujer que va a ser libre y empoderada abortando, y abortar es matar a un hijo, así que sí, básicamente es verdad.

La palabra empoderarse es una palabra talismán, una palabra que ha pasado a nuestra lengua con traducción tan literal del inglés empower, que me suena fatal, la verdad.

Esta palabra tiene un componente marxista y componente feminista, ambos unidos como actualmente se estila, ya que el feminismo original que buscaba la igualdad de la mujer fue secuestrado y manipulado hasta convertirse en un engendro que busca de la degradación máxima de la mujer.

La definición del término originalmente parecía razonable. Dicho término se aplicaba a todos los grupos vulnerables en un proceso por el cual las personas fortalecen sus capacidades, confianza, tienen visión y protagonismo como grupo social para impulsar cambios positivos de las situaciones que viven.

Pero finalmente es marxismo cultural en estado puro: la lucha de clases transformada en lucha permanente opresor-oprimido, mayoría-minoría. Y por supuesto, como nos tienen también acostumbrados, es una palabra bonita escondiendo una realidad terrible, lo mismo que salud reproductiva significa aborto.

Pero empoderarse finalmente tiene relación con algo profundamente humano e intemporal y es la propia autoestima. La autoestima tiene a la vez que ver con otras dos cuestiones, los mensajes que sobre mí mismo recibo del exterior y la necesidad de sentirse amado.

Cuando una persona no se siente amada de forma incondicional y los mensajes que recibe sobre sí misma son degradantes entonces su autoestima baja y se desprecia a sí misma. Esta falta de autoestima se puede manifestar de forma pasiva odiándose a sí misma o de forma activa odiando a otros.

Y aquí es donde empieza una relación abusiva o de maltrato, cuando una persona encuentra alivio a su falta de autoestima destruyendo a otra, vejando y humillando a otra y en casos extremos matando a otra.

¿Pero qué es el empoderamiento? Es que yo encuentro alivio a mis frustraciones reales o inventadas y a mi posición de víctima, real o inventada, (porque yo no soy víctima por el hecho de ser mujer) a mi carencia de afecto y a mi falta de sentido en la vida humillando, vejando o matando a otro.

En la realidad la «terapia de empoderamiento» que de manera obligatoria se da en muchos países para las víctimas de «violencia de género» es exactamente esto.

Pero como siempre el demonio, que es mentiroso por naturaleza, me ofrece empoderamiento y me da humillación, me promete felicidad y me trae desgracia, me promete realización personal y me trae destrucción.

Yo encuentro mi autoestima, mi vida y mi dignidad no en denigrar al otro ni mucho menos en acabar con él, sino en sentirme amada por Dios primeramente de una forma incondicional. Yo encuentro mi autoestima en mirarme a mí misma y al otro como Dios nos mira, desde la verdad de mi realidad, pero a la vez con la mirada de la Misericordia de Dios. Yo encuentro mi autoestima en saberme hija amada de Dios desde la eternidad y que valgo el precio de la sangre de Cristo. ¡Eso sí que es de verdad empoderamiento!





sábado, septiembre 25, 2021

No tenemos miedo, seguiremos rezando y acompañando a las embarazadas

No tenemos miedo, seguiremos rezando y acompañando a las embarazadas

La encíclica Evangelium Vitae es una fuente inagotable de luz para mí, en cuanto a la forma de actuar de la cultura de la muerte y también en cómo combatirla desde la fe.

Ciertamente para entender cuál es la verdadera batalla que estamos librando a día de hoy con la cultura de la muerte imperante no debemos de perder de vista cuáles son las estructuras de poder interrelacionadas que la dirigen (instituciones internacionales, gobiernos, grandes empresas oligárquicas…) pero es de vital importancia darnos cuenta de que en realidad como dice San Pablo en la carta a los Efesios, no estamos luchando contra enemigos de carne de hueso sino contra alguien más, alguien más inteligente de nosotros, alguien que conoce muy bien nuestras debilidades y alguien que tiene planes de odio contra la humanidad y contra Dios.

Si la batalla que estamos librando si es de naturaleza espiritual, aunque tenga repercusiones en el ámbito de la vida de las personas, esto nos aclara las armas que tenemos que utilizar, las que Cristo nos ha dado. Aunque usar armas espirituales no significa que solo tengamos que esperar de brazos cruzados que Dios lo solucione, eso no es espiritualidad sino quietismo.

San Juan Pablo II nos muestra cuál es la estrategia del demonio, que no ha cambiado desde el principio de la humanidad, siempre la misma: engañar y matar. Por eso se le caracteriza como homicida y el padre de la mentira.

La estrategia de la cultura de la muerte es esa misma, engañar, mentir, confundir… y este engaño va dirigido a la que es la causa del pecado original: querer ser como dios sin Dios, decidir lo que está bien y lo que está mal, llamar a lo bueno malo y a lo malo bueno y esto conduce al segundo objetivo, alejar a la persona de Dios y llevarla por lo tanto a su destrucción físicamente y para toda la eternidad.

Hay una característica más que me atrevo a añadir de como actúa el demonio y es que Dios siempre propone, y el demonio siempre impone. Dios siempre respeta nuestra libertad, ni siquiera se impone a sí mismo. El demonio no y la cultura de muerte tampoco, todo es una imposición, la libertad queda anulada y cualquier disidencia debe de ser eliminada. Si en algo se han caracterizado todos los regímenes autoritarios y genocidas de la historia hasta ahora (incluido el que estamos viviendo) es la imposición por ley de sus normas contra la vida y la dignidad de la persona. Por supuesto todo lo hacen por nuestro bien, faltaría más.

¿Cuál es el camino para resistir a estos envites? Resistir firmes en la fe y estar dispuesto a morir si es necesario «Porque el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mí, la encontrará. Porque, ¿de qué le servirá al hombre ganar el mundo entero si pierde su vida?, o ¿qué podrá dar el hombre a cambio de su vida?»

No hay otro camino.

Morir no se refiere únicamente a la muerte física, que también, sino a la muerte civil y social: perder el trabajo, perder los bienes, ir a la cárcel, ser despreciado, ser marginado… El martirio en otras palabras.

El demonio miente cuando dice que puede dártelo todo y hacerte feliz, pero también miente cuando dice que puede quitártelo todo, no puede, solo puede hacer lo que Dios le permite y Dios le permite lo que en su infinita sabiduría sabe que puede ser fuente de mayor bien.

El aborto es la mayor mentira y el mayor engaño que conduce a la muerte y a la destrucción de todo el que se involucra en el mismo, incluyendo a las sociedades y a las personas que lo toleran como mal menor.

El aborto es ya parte de la macabra religión de Estado y es por lo tanto impuesto tratando de eliminar la objeción de conciencia de los médicos y ahora la posibilidad de brindar apoyo, consuelo y oración a aquellas personas engañadas a las cuales se les presenta el aborto como única y obligatoria salida (el demonio impone, ya sabemos).

Pero no podrán, en primer lugar, porque aunque yo tenga escasos conocimientos jurídicos sé que la ley pone algunos requisitos como que sean más de 20 personas que harán que no vaya nadie a la cárcel finalmente, pero no importa, el objetivo es que se tenga miedo, ese maravilloso instrumento de manipulación del cual nos están dando a manos llenas.

Pero no podrán sobre todo si nos mantenemos firmes y no tememos a las consecuencias como los mártires no temían a la muerte, porque el Rey de los mártires nos acompaña y fortalece.

¡No tengáis miedo! decía San Juan Pablo II. No lo tenemos, seguiremos dando la batalla, seguiremos dando apoyo al embarazo en dificultad, seguiremos rezando, seguiremos acercando a la misericordia a las víctimas del aborto, seguiremos siendo testigos del Evangelio de la Vida.

La victoria es nuestra “Christus vincit! Christus regnat! Christus imperat!”.










lunes, septiembre 13, 2021

Los modernos castrati

Este verano me ha sobrevenido una gran afición por la vida y la música de los castrati. Empezó el tema explicándole a una persona las diferencias de registro en técnica vocal entre varones y mujeres, luego me puse la famosa película “Farinelli” y acabe siendo toda una apasionada en el tema y escuchando la única grabación que disponemos del último castrato, Alessandro Moreschi.

Los castrati fueron cantantes castrados que entre los siglos XVII y XIX, sobre todo en la época barroca eran muy famosos y apreciados gracias a sus bellas voces agudas. Pero para obtener aquel refinado tono eran sometidos de niños a la emasculación, con devastadores efectos psicológicos y físicos.

¡Y de eso quiero hablar, de los devastadores efectos psicológicos y físicos que tiene la castración! ¡Qué espanto! ¡Es algo terrible castrar a un niño! ¡Menos mal que ya no existen! Pero resulta que esta práctica no solo no ha desaparecido sino que se acepta, y no solo se acepta sino que se fomenta. Aunque ahora la castración empieza de forma química con los inhibidores de la pubertad.

Antes de explicar las devastadoras consecuencias de la castración química o quirúrgica, debido a temas musicales o a los supuestos “transgénero” quiero advertir sobre una leyenda negra que corre sobre los castrati y la iglesia.

Si leemos artículos sobre los castrati parece que fue la Iglesia la que empezó con esta bárbara costumbre alegando que estaba prohibido que las mujeres actuaran en los escenarios y cantaran en la iglesia y por eso había que castrar varones. Nada más lejos de la realidad.

Cierto es que en algunos momentos de la historia las mujeres tuvimos estas prohibiciones que no pertenecían únicamente al ámbito eclesiástico sino civil, pero esto no significaba que la Iglesia promoviera la castración, al contrario, la Iglesia siempre se ha opuesto a la mutilación genital, es más, era un acto castigado con la excomunión.

De hecho, para entrar en un coro eclesial los castrati que solicitaban el ingreso tenían que mentir y decir que la castración había sido de forma natural y no provocada. Porque la realidad es que los padres castraban a sus hijos para que triunfaran en el mundo de la opera cosa que obviamente solo conseguían unos pocos

El fin por lo tanto era no el conseguir una voz aguda de soprano, cosa que era perfectamente posible a través de contratenores y falsetistas, sino que fue la industria operística del momento la que prefería castrati, puesto que juntaba lo mejor de la voz masculina y femenina.

Las consecuencias físicas eran devastadoras: “Físicamente, a consecuencia del hipogonadismo primario o falta de testosterona, muchos castrados parecían grotescos y monstruosos, puesto que el desajuste hormonal hacía que brazos y piernas se alargaran desproporcionadamente durante la adolescencia y creaba desproporción con respecto al torso.

También eran barbilampiños y poseían un exuberante cabello, aunque carecían de vello en las extremidades. La grasa subcutánea se desarrollaba más que en un hombre normal y se acumulaba en caderas, glúteos y áreas del pecho, lo que les daba una silueta afeminada

Algunos castrados tenían ginecomastia, senos grandes y grasos que parecían de mujer, o depósitos lípidos en los laterales de los párpados, que les creaban distorsiones faciales e hinchazón y arrugas.” (Chequeo médico a los castrati)

Psicológicamente les afectaba también profundamente y tenían constantes cambios de humor, depresión severa y eran frecuentes los suicidios

El impedir que un niño varón se desarrolle y tenga su pubertad es verdaderamente un acto infame y aberrante que tiene terribles consecuencias para la persona en todas sus dimensiones.

Que dicha castración sea química o quirúrgica, que sea justificada en el virtuosismo musical o por una ideología transgénero (y usemos el eufemismo de “inhibidores de la pubertad” y lo hagamos hasta obligatorio por ley so pena de quitarle la custodia al padre que se niegue o la licencia al médico que se niegue) no cambia la realidad del horror, solo es una vuelta de tuerca más de la cultura de la muerte y de destrucción de la persona.

María José Mansilla

Publicado en Rel 


martes, julio 06, 2021

Erigida en Polonia la campana «La Voz del No Nacido»

Excelente iniciativa que recoge Infocatólica




 Campana «la Voz del no nacido», julio 2021 | © Justyna Grzyb, la Fundación «Sí a la Vida»

Bendecida por el Papa Francisco el año pasado

Polonia: erigida la campana «La Voz del No Nacido» que promoverá el derecho inalienable a la vida de todo niño concebido

«La Voz del No Nacido» es el nombre de la campana financiada por la fundación polaca Zycia Tak de Subcarpatia, que fue bendecida por el papa Francisco el año pasado. Pesa casi una tonelada, acompañará a partir de ahora a los acontecimientos que promueven el derecho inalienable a la vida de todo niño concebido.

A finales de junio, en Kolbuszowa, en el sur oeste de Polonia, tuvo lugar la ceremonia para erigir la campana «La Voz del No Nacido» en la iglesia de Todos los Santos. El acto fue precedido por una preparación espiritual de dos días. La misa con la introducción de la campana fue presidida por el obispo Jan Wątrobya, ordinario de Rzeszów.

La preparación espiritual para las celebraciones fue dirigida por Don Przemysław Drąg, Pastor Nacional de familias, quien habló de la importancia de defender la vida desde la concepción hasta la muerte natural.

«No se puede ser indiferente respecto a cuántos niños mueren como resultado del aborto», dice Bogdan Romaniuk, vicepresidente de la Fundación «Sí a la Vida», promotor de la iniciativa. Hace un año, se lanzó la idea de que la campana simbólica fuera fundida aquí en el Subcarpático, en el famoso taller de Jan Felczyński, en Przemyśl.

«Hoy toca para recordar el derecho inalienable a la vida, para sensibilizar y despertar conciencias, no solo en Polonia, sino en todo el mundo», añade Bogdan Romaniuk.

El impulsor de la iniciativa de la campana subraya que fue consagrada por el Papa Francisco, quien la tocó simbólicamente por primera vez. «La campana, que comenzó su peregrinaje en Roma, está de camino por toda Polonia. Hoy, fue erigida solemnemente en la parroquia de Todos los Santos en Kolbuszowa, donde permanecerá un tiempo antes de emprender otras rutas de peregrinaje», dijo. Además de Jasna Góra, donde estará la campana el 8 de diciembre, está previsto que llegue, entre otros lugares, a Cracovia, Olsztyn y Lubaczów.

Como señala Romaniuk, «La Voz del No Nacido» es muy elocuente en su exterior. Está decorada con un adorno en forma de cadena de ADN. Su intención es de simbolizar el código genético de los padres: una mujer y un hombre, una madre y un padre de una nueva vida. Además del nombre de la campana, hay una imagen ecográfica de un niño concebido y las palabras del quinto mandamiento del Decálogo: ‘No matarás’. Mostramos que esta ley está vigente a lo largo del tiempo».

«También hay las palabras del Libro de Jeremías: ‘Antes de que te formara en el vientre, te conocía y te consagré’. Con este símbolo, indicamos la intervención de Dios en cada concepción», dice un miembro de la Fundación «Sí a la Vida».

Como señala Bogdan Romaniuk, la noticia del nuevo símbolo provida está ganando notoriedad no solo en las parroquias de Polonia, sino también en las organizaciones provida. Añade que la idea de lanzar más campanas como voces de los no nacidos se está extendiendo a nivel internacional.

«Nos ha contactado una organización provida de Ecuador, estamos discutiendo seriamente la posibilidad de tal campana, de que su corazón suene por la gente de este país. Una solicitud similar vino de Ucrania», explica. Cuando se hayan fundido las campanas, lo más probable es que también sean consagradas por el Papa Francisco.

La campana «Voz del Por Nacer» pesa cerca de una tonelada. Su tarea es recordar el destino de más de 42 millones de niños que mueren cada año a causa del aborto en todo el mundo.



domingo, junio 20, 2021

Paternidad, reflejo del amor de Dios

 


Ahora que parece que en muchos ámbitos el padre es relegado a segundo término, he encontrado este artículo que me ha emocionado. Algo parecido encontré hace muchos años en un libro del Cardenal Wojtila respecto a la paternidad y la maternidad.

Jennifer Miller

Dios llama a algunos hombres a la paternidad. La forma en que se le pide a cada uno que viva esa llamada es única. Algunos viven físicamente el llamamiento, como padres biológicos o adoptivos; otros lo hacen espiritualmente como religiosos o padrinos. Cada padre elige ofrecer su vida por los demás.

Los abuelos, diáconos, padres adoptivos y sacerdotes católicos son solo algunas de las muchas formas en que los hombres pueden vivir una paternidad santa. Independientemente de la forma que adopte, la vocación de la santa paternidad requiere un compromiso total, sacrificio y entrega de sí mismo: una opción de amar, de querer el bien de otro.

John Betz, esposo y padre de tres hijos, reflexionó sobre este amor de encarnación, especialmente a la luz de las próximas vacaciones. «Esto puede ser bastante obvio, pero así como el Día de la Madre es un buen día para pensar en la maternidad de María, el Día del Padre es un buen día para pensar en la Paternidad de Dios, como nuestro Padre, pero también y principalmente como el Padre. del Hijo», reflexionó. «En cuanto a mí, quizás el mayor desafío sea perder tiempo y dejar de lado el trabajo, que a veces es urgente, para estar con mis hijos. He aprendido que lo que realmente quieren, más que cualquier otra cosa que no sea amor, es mi tiempo y atención.

«Cada día presenta desafíos en este sentido, dada la cantidad de trabajo que tenemos que hacer en un mundo que prioriza el trabajo, no el ocio o el juego de un domingo por la tarde. Dios el Padre es nuestro mejor ejemplo y debería ser el mío», agregó Betz.

Los santos padres, incluido Joseph Miller de South Bend, reflejan el primer amor original de Dios el Padre. Dan su vida por los demás, literal y figurativamente. Son discípulos que siguen el ejemplo principal de Jesús.

Desde San Maximiliano Kolbe y San Damián de Molokai hasta el Beato Benedicto Daswa y Santo Tomás Moro, la Iglesia atesora el testimonio de hombres que viven bien su vocación de paternidad. Tanto en la vía espiritual como en la física, los santos padres reflejan bien el primer amor original de Dios el Padre. Dan su vida por los demás, literal y figurativamente. Son discípulos que siguen el ejemplo principal de Jesús.

Hablando con sus hermanos sacerdotes, el Papa Francisco predica la paternidad espiritual.

«Todos, para existir, para ser completos, para ser maduros, necesitamos sentir la alegría de la paternidad: incluso los que somos célibes. La paternidad es dar vida a los demás, dar vida… para nosotros es paternidad pastoral, paternidad espiritual, pero esto sigue siendo dar vida, esto sigue siendo padre.

«Esta es una gracia que los sacerdotes debemos implorar: la gracia de la paternidad pastoral, de la paternidad espiritual. (…) De hecho, podemos tener pecados, incluso muchos pecados, pero no tener hijos e hijas espirituales, no ser pastores, equivale a una vida incompleta, que se detiene a mitad de camino (…)  Y por tanto, tenemos que ser padres, pero es una gracia que el Señor da».


Siguiendo el ejemplo de San José, el padre terrenal de Jesús, Luca Grillo, esposo de Jennie y padre de dos hijos por adopción, entiende su paternidad como «amar a mis hijos como un padre significa introducirlos en un mundo que definitivamente ha caído, pero  definitivamente ha sido redimido».

Josh Noem, un feligrés de Grillo en la parroquia St. Joseph, South Bend, es esposo y padre de tres hijos. «Me sorprende constantemente cómo cada uno de nuestros tres hijos es original y único», dijo. «Por mucho trabajo que hagamos para formarlos con consistencia y atención, he aprendido que la paternidad solo funciona cuando honra la individualidad de cada uno. A medida que crecen, es un placer caminar con ellos mientras descubren las personas para las que fueron creados. Es un regalo que nos llena de humildad».

Llevando 20 años casado, Noem agregó: «Oí que lo mejor que puede hacer un padre por sus hijos es amar a su esposa. He descubierto que eso es cierto ".

El padrino, el padre Adam Booth, CSC, y la madrina Jenny Miller pasan tiempo con su ahijado William Miller. Mientras más padres, padrinos, padres espirituales y todas las figuras paternas se inclinen hacia su relación con Cristo, más Él los llena. Independientemente de la forma que adopte, la vocación de la santa paternidad requiere total compromiso, sacrificio y entrega.

Dentro de la Diócesis de Fort Wayne-South Bend, hay padres que se despiertan a las 5 para reunirse y leer las Escrituras o rezar el rosario juntos antes de dirigirse a la misa diaria y luego a un día completo de trabajo. Al volver a casa, hacen malabares con el circo de tres pistas de la vida familiar, tratando de darle a cada miembro de la familia lo que necesita. Acuestan a los pequeños, luego comparten las tareas del hogar con su cónyuge antes de la oración nocturna y finalmente la oportunidad de descansar.

«Hacer todo esto requiere determinación y gracia, sin mencionar la humildad y el reconocimiento de que a veces fallarás. Quizás incluso con frecuencia. Sin embargo, incluso eso es bueno para sus hijos, porque verán que la vida se trata menos de tener éxito que de intentar y perseverar, dijo el feligrés de la catedral de St. Matthew, Rick Becker. Él y su esposa, Nancy, tienen siete hijos de entre 15 y 25 años y ocho ahijados.

El padre Zachary Rathke, CSC, de las parroquias St. Adalbert y Casmir en South Bend, dijo que le ha impresionado la vocación de sus dos hermanos mayores, ambos casados y tienen hijos.

Todo el día requiere el abandono de sus propios deseos y, en cambio, dedicarse constantemente a la familia», reflexionó Rathke.

«Como sacerdote y padre espiritual de una parroquia, tengo una vocación similar», compartió. «No debo limitarme a dedicar una jornada laboral de ocho horas y luego dar por terminado mi trabajo. Mi vocación es una llamada, una llamada que requiere que me abandone en Dios y a mi familia espiritual, derramándome constantemente por ellos, siempre dispuesto a atender las necesidades de los feligreses. No puedo simplemente decirle a un miembro de mi familia espiritual: 'No tengo tiempo, así que no me molestes'. Nunca dejo de ser sacerdote, como mis hermanos nunca dejan de ser padre. La oración es esa relación preciosa que es la base misma de mi llamado a ser sacerdote e instrumento de la presencia de Cristo en este mundo. Cuanto más me inclino hacia mi relación con Cristo, más Él me llenará y más será derramado en amor a través de mí.

«Damos solo lo que recibimos», coincidió Mons. Michael Heintz. «Experimenté la paternidad espiritual de grandes sacerdotes como Mons. William Lester, Padre William Hodde, Padre Donald Muldoon, Padre William Schooler, Mons. John Suelzer y el obispo D'Arcy. Como todos los buenos papás, me enseñaron a hacer dos cosas a la vez: amar y tener altas expectativas para quienes aman. También he aprendido sobre la paternidad espiritual de los muchos buenos padres que conozco mientras los veo vivir su vocación en relación con sus propios hijos. Sigo aprendiendo de ellos», continuó.

«Los sacerdotes siempre tienen algo que aprender de sus amigos que son padres, ya que viven el mismo misterio del amor que proviene del Padre, de quien proviene toda la paternidad, como dice Efesios 3.15».

Philip Muñoz, de la parroquia St. Joseph, Mishawaka, es esposo y padre de niños pequeños, algunos de los cuales están en la tierra y otros que ahora están en el cielo. Describió este desarrollo de la paternidad, para el individuo y la sociedad en general.

Convertirse en padre exige "que uno desarrolle ciertas virtudes, especialmente la responsabilidad, la gentileza y la paciencia", dijo. "La iglesia doméstica le ofrece a uno una participación en la comunidad, el lugar donde vive, y su futuro se vuelve importante de nuevas maneras, porque es el hogar de sus hijos".

Dentro del hogar, Muñoz también descubrió que la paternidad "ayuda a uno a comprender las virtudes de la maternidad y cómo las madres y las esposas se sacrifican por sus hijos y sus familias".

sábado, junio 19, 2021

La cara oculta de la fecundación in vitro: aborto, eugenesia, hijos a la carta o no aptos para vivir


En tan solo un año, más de 340.000 embriones fueron congelados o asesinados en España y Estados Unidos por la fecundación in vitro
Magnífico y esclarecedor artículo. Desde que en los años 60 se me habló de la fecundación asistida no ha dejado de inquietarme, por eso lo traigo aquí, para no perderlo. Es breve pero bien documentado.


REL

Una industria eugenésica y contraria a la vida

Sin embargo, no son pocos los que consideran que la industria de la fertilidad es un vehículo provida para fomentar la natalidad, cuando realmente es “inquietantemente propensa a las prácticas eugenésicas y contrarias a la vida”. El mismo año, Religión en Libertad informó de por qué “la mayoría de estas técnicas son éticamente injustas e inmorales”, salvando excepciones como la naprotecnología o el reconocimiento natural de la fertilidad, éticamente correctas y aceptadas por la Iglesia. 

Nancy Flanders ha contribuido detalladamente a esta propuesta, profundizando en cómo, lejos de contribuir a la vida, las técnicas de Fecundación in Vitro no son más que “una industria eugenésica rentable. Cuando las parejas comienzan el proceso de FIV, es probable que no estén pensando en todos los niños que crearán y que serán destruidos en el laboratorio o que se perderán por un aborto espontáneo”, escribe en Live Action.

Más del 25% de las mujeres que se someten a ciclos de FIV tienen un aborto espontáneo en su primera sesión completa. Es una pérdida desgarradora de sufrir, pero antes de que el embrión se transfiera al útero de su madre, es probable que haya perdido a sus hermanos”.

Superar la nota de corte para nacer: el examen genético previo

Las prácticas eugenésicas y de descarte de los “no aptos” para la vida comienza, en la Fecundación in Vitro, en los momentos previos a la implantación del embrión, mediante el examen genético previo o preimplantation genetic screening (PSG).

Mediante este examen, “los embriones se pueden analizar para comprobar si tienen alguna afección como el Síndrome de Down o la Fibrosis Quística y ser posteriormente desechados, incluso aunque no tengan más afecciones”.

Flanders advierte que muchas parejas han firmado contratos con clínicas de fertilidad permitiendo la destrucción automática de los embriones que no superen la “nota de corte” al ser diagnosticados como aneuploides. Son portadores de células con un número anormal de cromosomas y “genéticamente rebeldes” que causan desde fibrosis quística o síndrome de Down hasta cáncer y metástasis.

Miles de muertos por diagnósticos erróneos

El destino de casi todos estos embriones suele ser su pérdida, ya sea por la imposibilidad de su implantación o bien porque estos son “desechados” en las propias clínicas y tratamientos, incluso bajo una elevada posibilidad de error.

De hecho, el médico de Fiv Norbert Gleicher, fundador del Centro de Reproducción Humana, asegura que el examen genético previo ha diagnosticado erróneamente muchos embriones sanos. “13.000 mujeres al año han perdido la oportunidad de tener un hijo porque sus embriones, que realmente eran normales, fueron destruidos”, cuenta Flanders. “Con múltiples embriones creados para cada mujer, son cientos de miles los que son destruidos por no ser catalogados como viables cuando lo podían haber sido perfectamente”.

Tras la promesa de un hijo se asesinan a cientos

Por ello, Flanders advierte de que herramientas como el diagnóstico genético previo a la implantación “no se emplea en parejas para ayudar a su fertilidad”, sino a parejas fértiles que quieren descartar la posibilidad de tener un hijo enfermo de, por ejemplo, fibrosis quística.

Cuando la pareja descubre que son portadores de esta afección, se les recomienda evitar la reproducción natural y optar por la FIV con este diagnóstico, “en una misión de búsqueda y destrucción para asegurarse de no dar a luz a un niño con esa condición genética”.

Los sanos deciden quien vive y quien muere

Sus embriones se crearían en el laboratorio, donde se analizarían en búsqueda de afecciones. Al detectarlas, “la pareja podría donar ese embrión a la investigación científica o destruirlo. Solo los embriones sanos se considerarían dignos de ser transferidos. Aunque lo consideran algo compasivo, en realidad es la eugenesia moderna. Es la eliminación de los considerados “no aptos". "Las personas sanas deciden que es mejor que otras personas no nazcan”.

Muchos padres eligen tener hijos de forma natural a pesar del riesgo de tener un segundo hijo con la misma condición genética”. Es el caso de Mariana de Ugarte y su marido, José Luis, que han tenido dos hijos seguidos con síndrome de Down. “Son etiquetados como crueles y egoístas, pero la idea de que la calidad de vida de una persona dependa de la salud futura es discriminatoria, y a nadie se le puede garantizar una vida libre de enfermedad”.

Hijos diseñados “a la carta” que se consideran cosas

En relación a la eugenesia, Flanders destaca cómo “las parejas LGBT y hombres y mujeres solteros recurren a la donación de óvulos y esperma para crear al hijo biológico que desean. Para ello, buscan las descripciones de los donantes para encontrar a la persona que tenga las características más deseables”.

Es el caso del London Sperm Bank, que fue investigado en 2015 por prácticas eugenésicas y prohibir el acceso a hombres con afecciones comunes, como la dislexia o el TDAH.

Hermanos que se casan sin saberlo

“La mayoría de solicitantes de esperma y óvulos son examinados de inmediato debido a factores relacionados con la salud, la altura y antecedentes familiares”, según The Harvard Crimson. “En California Cryptobank, solo el 1% de los solicitantes de esperma son aceptados. Innumerables niños se crean a partir de su esperma y caminan por las mismas calles que sus hermanos sin tener ni idea”.

Algunos de ellos, afirma Flanders, “han llegado a casarse sin saberlo. La industria de la fertilidad no es provida, a pesar de lo que creen muchos próvida. Ha destruido innumerables vidas, y otras tantas han sido marcadas emocionalmente por una industria que dicta quién es digno de vivir y quien no”.