Una nueva técnica desarrollada en el Reino Unido, que permite a los padres sostener un modelo a tamaño natural de de su bebé nonato, pone en jaque a los proabortistas.
REDACCIÓN HO, Traducción C. Castro / The Cristian Institute.- " Es asombroso ver que las caras de las madres", manifiesta el inventor, el Doctor Jorge López, que desarrolló la tecnología del PhD en la Real Escuela de Bellas Artes.
Su técnica se realiza tomando datos por medio del ultrasonido y de las exploraciones de MRI, para construir un modelo de yeso de tamaño natural mediante la utilización de un método que denominó prototyping rápido.
En 2004, la nueva tecnología que permitía a los padres ver a sus bebés en las exploraciones móviles, las llamadas 3D, provocó numerosas peticiones para que se revisara la ley de aborto.
Estas ecografías por debajo de las 24 semanas, el límite fijado para poder abortar legalmente en el Reino Unido, mostraban claramente al bebé bostezando en el seno materno, sonriendo o "paseándose" por la matriz. Pero a pesar de que con estas pruebas la mayor parte de las mujeres apoyaron que se procediera a la reducción del plazo legal establecido para el aborto, la ley permaneció inalterable cuando el Parlamento británico la sometió a votación el año pasado.
Ahora, esta nueva tecnología que modela a tamaño natural al no nacido podría alimentar de nuevo el debate, para que se revise la cuestión en Inglaterra, Escocia y en el País de Gales, donde se permiten el aborto hasta 24 semanas de embarazo bajo el consentimiento de dos doctores.
La legislación en el Reino Unido
El aborto hasta el nacimiento es además legal cuando se considera que peligra la vida de la madre, o si se le diagnostica al nonato una seria malformación -al final es sin embargo un coladero, porque 'la grave malformación' ha llegado a incluir como tal un simple paladar hendido). En Irlanda del Norte, el aborto es ilegal, excepto en el supuesto de peligro para la vida de la madre. Uno de cada cinco embarazos registrados en Inglaterra y País de Gales acaba en el aborto
Según las últimas cifras gubernamentales, relativas a 2006, de los 5.3 millones de abortos quirúrgicos perpetrados en Inglaterra y País de Gales, el 0.4 % se argumentó apelando al riesgo a la vida de la madre; el 1.3 % al diagnóstico de malformación fetal; más del 98 % era para motivos sociales.
Testimonio: "Sentir que eran células, no un bebé, era mi vía de escape"
En 2006 una mujer declaraba en la BBC: "Fui al Servicio de Consejo de Embarazo británico para buscar asesoramiento. Pregunté si un feto de diez semanas era un bebé y ellos me dijeron, 'No, es solamente un conjunto de células'. Sentir que no era un bebé era mi vía de escape, pensar que no estaba haciendo nada malo"
"Pero después quedé afectada emocionalmente, y llegue a padecer anorexia. Yo era promiscua desde hacia algún tiempo. Pero al mismo tiempo no pensaba que esto pudiera tener relación alguna con el aborto".
Esta mujer revelaba seguidamente que un aborto fallido de un segundo hijo cambió su punto de vista sobre el aborto: " Cuando miré a mi hijo latiendo con su propio corazón, supe que hacía nueve años lo que había destruido era un bebé... comprendí que yo había estado reaccionando por miedo y que realmente no lo medité. Estaba empañada en negarlo: ' Esto no es realmente un bebé, son células".
"Las mujeres que afrontan un embarazo en una situación de crisis o de dificultad merecen más respuestas que el aborto. Si hay otras opciones, ¿por qué debería ser la muerte de un bebé la única respuesta?", concluía esta mujer, víctima del aborto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario